El fraude comienza al momento de la solicitud del crédito, diversas denuncias de vecinos han dado a conocer que uno de los métodos de préstamo es de la siguiente forma: el usuario solicita la cantidad de 15,000.00 pesos, los prestadores aprueban el crédito, sin embargo sólo le otorgan 7,500.00 pesos, justificando que la otra parte de 7,500.00 pesos son los intereses que ya se deben por parte del usuario; siendo así que el prestatario se ve obligado a solicitar el doble de la cantidad inicial para que se le pueda otorgar la cantidad que requiere desde un inicio. En estos casos, los métodos para el cobro del crédito van desde amenazas personales, familiares y de índole física, ya que amedrentan a las personas para hacerlos caer en desesperación y logren conseguir el dinero que les deben.

Otro caso más concurrente en la forma de cobro es la siguiente: de primera instancia, se solicita el préstamo, posterior, al ser aprobado se les otorga la cantidad, sin embargo, cuando se cobra el dinero, ya sea por alguna razón que el prestatario se atrase con el pago, la tasa de interés aumenta a partir de un 20% semanal. Asimismo, les hacen creer que los mismos prestamistas pueden apoyarlos al pago; los defraudadores venden algún bien mueble, por ejemplo, un auto valuado en 150,000.00 pesos, para que el prestatario apoye a saldar su deuda, posterior a la venta del auto y a la deuda liquidada, los prestamistas le cobran al prestatario la cantidad total del auto con la justificación de que esa es la cantidad que ahora les deben.